Ajuste y más ajuste eso estamos viviendo por estos días.
El dólar no para de subir, el desempleo nos muestra su cara más desolada,
fabricas que cierran dejando a cientos de familias sin sustento, gente en
situación de calle que se duplica día a día, comedores y merenderos que
funcionan a full porque hay muchos chicos que están privados de un plato de comida
en su hogar. Escuelas vacías porque los docentes realizan paros reclamando un
salario justo o no pueden abrirlas por diferentes problemas de infraestructura que hace poquito se llevó dos vidas. El
último día de agosto y de acuerdo a la información de algunos medios, a pesar
del terrible frio y la persistente lluvia más de 400.000 personas marcharon en
contra del posible arancelamiento de la Universidad
y en defensa de la escuela pública. Esta reacción de docentes, no docentes,
alumnos y padres fue en respuesta al recorte en las partidas del presupuesto
universitario, lo que conduce inevitablemente a no poder pagar las facturas, a salarios congelados, al recorte
de programas y de becas, y a la falta de insumos entre otras cosas. Nuestro
país se ha destacado, especialmente en nuestro continente, por su cultura y
educación. Su enseñanza pública nos ha dado varios premios Nobel e innumerables
profesionales, muchos de ellos provenientes de hogares humildes que finalizadas
sus carreras, fueron reconocidos internacionalmente. La educación pública de
calidad, nivela para arriba y permite el ascenso social, Si la siguen
destruyendo, serán pocos los que puedan acceder a una mejor calidad de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los editores se reservan el derecho a no publicar un comentario que no respete buenas costumbres o sea violento y/o insultante.